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 In Frutos de la Tierra, Portada

La cata maridaje se llevó adelante con vinos de moscatel

Chema Ferrer

La pasada semana se llevó adelante en la Bodega Teulada una cata de quesos artesanales de cabra y oveja de la quesería artesana Vega de Ayora. El maridaje se llevó adelante con vinos fundamentalmente de moscatel, aunque también participaron otros de la bodega. Estas fueron las armonías: Queso de Cabra Tierno con el Vino blanco Vent de Gregal, Queso de Cabra Curado acompañado del rosado Vent de Llebeig, Queso Curado de Oveja con un sorprendente orange wine o vino naranja La Sisca de Paqui, el Queso Curado de Cabra al Romero con el tinto Llum de Lluna y la marcha triunfal que supuso el Rulo de Cabra con el premiado y reconocidísimo vino dulce licoroso Càntic al Sol. Todos los maridajes se produjeron a la perfección salvo la del vino tinto con el queso curado de cabra al romero, y es que, a pesar de las costumbres y los tópicos, los vinos tintos no son los más adecuados para acompañar la degustación de quesos; vinos blancos y rosados, cavas y espumosos, vinos dulces blancos y tintos (aquí sí), cervezas de calidad…, todos mejor que un vino tinto.

Denes, familia de queseros

Ayora, localidad valenciana de interior, posee una larga tradición en la explotación agropecuaria. Esta se ve reflejada en los cercanos restos arqueológicos íberos del Castellar de Meca, ciudad fortificada donde sus estructuras y grandes depósitos y almacenes son testigos de la gestión de los recursos del campo. Ayora es famosa por la producción de mieles de calidad, de hecho, existen pinturas rupestres en su término mostrando los trabajos de recolección en panales silvestres; pero también es importante su tradición quesera, hoy por hoy representada en la Quesería Artesana Vega de Ayora. Esta quesería posee una importante granja de cabras de raza granadino murciana con la que abastece su quesería. La explotación ganadera está rodeada de una finca agrícola propia de 150 hectáreas donde se cultiva avena, trigo, maíz, cebada, guisante y girasoles. Con buena parte de estos frutos de la tierra, se prepara la alimentación de las cabras, sin añadir ningún otro compuesto o preparado alimenticio. Esta circunstancia de autoabastecimiento permite la obtención de una leche sabrosa y aromática. La quesería todavía mantiene algunos métodos de producción artesanales dentro de sus modernas instalaciones. Desde la década de los ochenta del pasado siglo, son más de tres décadas de producción de quesos y yogures a partir de la leche pasteurizada de sus propias cabras, una empresa iniciada por el matrimonio José Sabater del Valle y María Francisca Montesinos y que desde el 2014 dirige la familia Denes, Noelia y Constantin.

Los quesos de Ayora pueden adquirirse en las queserías del Mercado Central de Valencia, en el de Ruzafa (Gea Charcuteros), en las charcuterías de Gargallo y en los supermercados de El Corte Inglés entre otros.

Constantín Denes elaborando queso.

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